Querido compañero/a:
Como tú, soy profesional del bienestar y puedo asegurarte que entiendo tu situación. Muchos de nuestros compañeros, y quizás sea tu caso, están viendo disminuidos más del 50% sus ingresos, otros se ven obligados a cerrar sus centros por falta de rentabilidad. Nos imponen cambiar los horarios, a veces cada semana por la situación de la pandemia, y esto se traslada a una falta de información y conexión con nuestros usuarios. Ellos, nuestros clientes, los más queridos por nosotros, están en muchos casos perdidos, sin saber cómo conectar con nosotros de nuevo.
Por si fuera poco, es obligado a adaptarse a un entorno digital, en el cual los que estamos acostumbrados a trabajar directamente con personas nos parece frío, distante y al principio nada sencillo. En algunos casos sin saber por dónde empezar.
Nos dicen que el futuro está en internet, pero tú y yo sabemos que NO sólo basta con tener un perfil digital. Hay tanta información en la red que no nos encuentran nuestros clientes. Comprendo lo que es querer dedicarte únicamente a lo que te gusta sin tener que preocuparte por cuestiones de marketing o venta online que se te escapan y a veces nos agobia.
Nadie nos advirtió nunca que saber comunicar digitalmente tu empresa sería necesario para lograr sobrevivir y seguir creciendo al menos en un 10% cada año.
Trabajando como profesional independiente veía que contratar espacios para determinados talleres era un reto, consumía mucho tiempo de búsqueda en la maraña de Internet, llamaba uno a uno de los propietarios y perdía horas para encontrar el que se adaptaba a mis necesidades.
Fui contratado por otras empresas, tuve un centro de bienestar propio, alquilé locales, y finalmente trabajé de autónomo creando mi propia comunidad de bienestar. Todo esto desde hace unos 20 años. Esto me hizo observar tanto las necesidades que tenemos los profesionales, como la otra parte: Nuestros clientes.
Ellos, y ahora más que nunca, necesitan encontrar una vía más flexible para poder seguir cuidándose sin estar restringidos por cuotas fijas y horarios rígidos. Necesitan rapidez y transparencia en sus compras.
A todos nos hubiese gustado que durante la construcción de nuestro proyecto encontrásemos una comunidad de profesionales afines a nosotros que compartiesen sus experiencias y consejos para poder aprender y crecer en equipo.
Imaginé esto: una única plataforma en la que todas estas posibilidades se convirtieran en una realidad. Aunar en un solo lugar a profesionales, propietarios de espacios y usuarios para generar conexiones entre ellos y de esta forma contribuir a crear un mundo más sano.